Chupete, ¿sí o no? - Mimamami

Chupete, ¿ángel o demonio?

Depende de con quien hables y en qué momento de la crianza se encuentre, puede que te digan “que suerte que exista el chupete” o “a buenas horas le di el chupete”.

Este es un elemento imprescindible para el bebé que toman biberón de forma habitual, porque le falta esa succión no nutritiva que necesita para un buen desarrollo neurológico, calmarse y regularse. Cuando hablamos de biberón no solo se incluye este, también entran dentro todas las opciones que existen diferentes al pecho. Lo importante aquí es la falta de succión, no el tipo de leche.

Si toma el pecho no es necesario el chupete. ¿Entonces por qué la mayoría de los bebés lo llevan?

Porque es muy cómodo para nosotras. Es nuestro ángel. El bebé necesita mucha succión y no toda es nutritiva. Para eso está el chupete, para cubrir la no nutritiva. Lo calma, lo relaja, por lo que deja de llorar. Y eso también nos calma a nosotras, ya que el llanto del bebé está diseñado para alterarnos, para ponernos en alerta.

Genial, ¡qué suerte que existan chupetes! Pero malas noticias… Se enganchan. Esa succión le crea tal placer que, llegado el momento, no se quiere separar de él.

Aparece el demonio. Se está haciendo mayor y se lo tienes que quitar (del cuándo ahora hablaremos). Pero tu peque dice que no, es su tesoro más preciado, lo necesita para calmarse, para dormir, etc. Y esto nos genera a todos angustia y ansiedad. ¿Cómo se lo quito si no quiere?

Por lo general es algo de lo que no se habla, y hablaré de ello en otra entrada del blog. Lo que debemos saber es que suele ser más sencillo de lo que pensamos.

Y, ¿cuándo se tiene que quitar? Aquí tal vez te sorprendas, pero al año. Máximo al año y medio (18 meses). ¿Por qué tan “pronto”? Puede producir deformaciones en la boca, problemas para hablar y un largo etcétera. Es la recomendación que hacen pediatras y odontopediatras, por lo que saben bien de que hablan.

A estas alturas de post igual te estás preguntando, ¿entonces qué? Es una decisión muy personal. Está claro que si el bebé no toma pecho debe usar chupete, pero si toma pecho es decisión vuestra usarlo o no. Tiene grandes ventajas, pero estas se pueden transformar en desventajas llegado el momento.

Y luego algo que tal vez nadie te ha contado. Hay bebés que no aceptan tetinas, ni chupete, ni biberón, nada. Si tu peque es uno de ellos, piensa en el demonio, tienes la suerte de no tener que quitárselo. Esa situación que genera angustia a todos, te la has ahorrado.

¿Habéis decidido que vuestro peque lleve chupete? Fenomenal, pero no todos son buenos para su boca. Hay infinidad de marcas, formas y materiales. Si quieres que tenga el menor impacto posible, debes saber qué chupete elegir y cómo usarlo. Esto también ocurre con las tetinas del biberón y es algo que se desconoce. Por eso te guiamos en todo el proceso de la maternidad y lactancia, en la formación cómo empezar con mi lactancia.

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